Formación y postgrado en Proceso corporal Integrativo (P.C.I.) con Antonio del Olmo
Shadana formación en yoga Iyengar con Silvia Jaén.
Diplomado en Psicoterapia Gestalt ( A.E.T.G. ) con Paco Peñarubia.
Diplomado en Hatha yoga ( E.I.Y. ) Certificado por Yoga Alliance , European Yoga Federation y Federación Española de yoga Profesional.
Diplomado en psico-musicoterapia ( I.S.C.T.E ) Lorenzo Amaro
.
Ya de pequeño siempre me llamaron la atención varias cosas.
Lo primero, la música estaba todo el día escuchando , grabando y mezclando . Ha sido un motor en mi vida que me ha hecho aprender a sentir lo que tanto me costaba hacer en mi vida cotidiana, como dice Nach es “el idioma de los Dioses “. Mi relación con la música no siempre ha sido buena, he tenido momentos donde la he rechazado, son esos momentos en que lo último que quieres oír son canciones bellas casi ni oscuras, donde todo lo ves sin sentido, incluso ahí también pude aprender que la música no era más un espejo de mi ser profundo en ese momento. Me gusta ayudar a la gente que lo necesita y durante muchos años hice que muchas personas lo hicieran en la pista de baile e incluso en sus casas. Esa fue mi época de dj y compilador de recopilatorios musicales en una discográfica internacional. Ahora mantengo una relación musical sana , desde que descubrí el spotify y otras herramientas sonoras puedo disfrutar de mayor apertura musical y sonora. El trabajo que realiza Lorenzo Amaro en el ( ISCTE ) como psiquiatra y creador de la psicomusicoterapia, fue para mí una iniciación y un reciclamiento hacia una nueva visión de la música como terapia. Nunca pensé que podía conocerme más a través de la música y a ayudar a la gente desde esta maravillosa y poderosa herramienta. Recuerdo la primera vez que escuché los cuencos tibetanos, fue un regalo de cumpleaños que nunca olvidaré y desde entonces parece que los cuencos y yo tenemos mucho en común ellos quieren decirme algo y yo intento escuchar y aprender de ellos. El curso de canto de armónicos de Nestor Kornblum fue muy grande para mí y en poco tiempo me di cuenta del valor del sonido de la voz. Enrique Carriedo maestro de cuencos cantores también supuso una ayuda y referencia en mi evolución sonora..
El cuerpo , siempre ha sido un canal de expresión para mí. De pequeño como portero de fútbol intentaba defender y la verdad es que me movía muy bien, me sentía bien parando y utilizando mi cuerpo como barrera, los deportes me han gustado mucho … pero mi relación con el cuerpo no era muy buena, padecía bronquitis asmática, grandes alergias , y un estado de cansancio constante, estaba bastante machacado, y esto me preocupaba, estaba acostumbrado a parar “ balonazos “ sin tomar acuse de recibo del daño que recibía mi cuerpo. Entonces gracias a Silvia Jaén mi mujer y maestra de yoga pude empezar a aprender el arte del yoga, creamos juntos la escuela Shiva Yoga realizando cursos de formación donde yo la ayudaba en las materias de autoconociento a través del yoga / Sangita Yoga . Actualmente sigo sus enseñanzas disfrutando de una salud y energía mucho mayores que en esos años de adolescencia. El yoga me ha demostrado que es una herramienta impresionante en la construcción de una persona a nivel energético, corporal y mental. Aunque soy profesor de hatha yoga ( E..I.Y ) el trabajo con Silvia desde el yoga Iyengar ha sido y es para mí fundamental en mi desarrollo y enseñanza del yoga. Trabajé durante 4 años dando yoga a niños en escuelas públicas en el programa “Muse “ de la Fundación Yehudi Menuhin y fue una experiencia muy enriquecedora a la vez de dura. Pasé por varios colegios y enseñaba yoga tanto en el aula como en sala con el tutor al lado, un trabajo serio, evaluado y que recuerdo con mucho cariño. Todavía recuerdo, como un niño gitano se sentó en el altillo del gimnasio en meditación completa y unos 30 niños más le imitaron haciendo lo mismo junto a varios profes durante varios minutos en silencio, por esto vale la pena enseñar. Actualmente he preferido dedicar mi energía a mis dos niños y dejar este trabajo para los vocacionales. Mi relación con el cuerpo va mejorando cada día más desde que realizé el curso de Terapia Gestalt en la (EMTG ) con Paco Peñarubia y su equipo y especialmente con el trabajo de Antonio del Olmo en el PCI donde puedo decir que estoy en disposición de decir que es este uno de los momentos mas potentes en plenitud y energía de mi vida, y se ha abierto una capacidad de apertura a la vida muy grande .
Parte de mi terapia personal la realice con Juan Manzanera y la supervisión con Lola Sánchez. También quiero resaltar los dos años que pase realizando terapia en la Fundación Rais de ayuda a las personas sin hogar. Esos años me ayudaron a colocar y limpiar lo mental, como decía Habib un profesor de yoga que tuve ( que en paz descanse ) , primero la terapia y después la disciplina. Sentía que me faltaba algo en mí y algo importante.
El amor , esta es la tercera cosa que me llamaba de pequeño, incluso cuando iba a misa , que no me gustaba nada, sólo la música del coro, donde tocaba mi hermano la batería, y la gozaba, sólo la sensación de que detrás de esos sermones cansados se podía sentir el amor en el fondo. Lo afectivo siempre me ha tenido preocupado pues yo siempre he sido una persona muy sensible y sencilla , y todo a mi alrededor parece que giraba al contrario de mí, era muy difícil centrarlo. Desde la música, pude empezar a entender mejor mis sentimientos y a expresarlos. La terapia Gestalt me ayudó mucho también en esto. El yoga me hacía encontrar mi sostén y mi calma a la vez. Todo esto hizo que naciera el sangita yoga ( el yoga de la Música ) donde pudieran convivir todos estos elementos juntos.
Shadana formación en yoga Iyengar con Silvia Jaén.
Diplomado en Psicoterapia Gestalt ( A.E.T.G. ) con Paco Peñarubia.
Diplomado en Hatha yoga ( E.I.Y. ) Certificado por Yoga Alliance , European Yoga Federation y Federación Española de yoga Profesional.
Diplomado en psico-musicoterapia ( I.S.C.T.E ) Lorenzo Amaro
.
Ya de pequeño siempre me llamaron la atención varias cosas.
Lo primero, la música estaba todo el día escuchando , grabando y mezclando . Ha sido un motor en mi vida que me ha hecho aprender a sentir lo que tanto me costaba hacer en mi vida cotidiana, como dice Nach es “el idioma de los Dioses “. Mi relación con la música no siempre ha sido buena, he tenido momentos donde la he rechazado, son esos momentos en que lo último que quieres oír son canciones bellas casi ni oscuras, donde todo lo ves sin sentido, incluso ahí también pude aprender que la música no era más un espejo de mi ser profundo en ese momento. Me gusta ayudar a la gente que lo necesita y durante muchos años hice que muchas personas lo hicieran en la pista de baile e incluso en sus casas. Esa fue mi época de dj y compilador de recopilatorios musicales en una discográfica internacional. Ahora mantengo una relación musical sana , desde que descubrí el spotify y otras herramientas sonoras puedo disfrutar de mayor apertura musical y sonora. El trabajo que realiza Lorenzo Amaro en el ( ISCTE ) como psiquiatra y creador de la psicomusicoterapia, fue para mí una iniciación y un reciclamiento hacia una nueva visión de la música como terapia. Nunca pensé que podía conocerme más a través de la música y a ayudar a la gente desde esta maravillosa y poderosa herramienta. Recuerdo la primera vez que escuché los cuencos tibetanos, fue un regalo de cumpleaños que nunca olvidaré y desde entonces parece que los cuencos y yo tenemos mucho en común ellos quieren decirme algo y yo intento escuchar y aprender de ellos. El curso de canto de armónicos de Nestor Kornblum fue muy grande para mí y en poco tiempo me di cuenta del valor del sonido de la voz. Enrique Carriedo maestro de cuencos cantores también supuso una ayuda y referencia en mi evolución sonora..
El cuerpo , siempre ha sido un canal de expresión para mí. De pequeño como portero de fútbol intentaba defender y la verdad es que me movía muy bien, me sentía bien parando y utilizando mi cuerpo como barrera, los deportes me han gustado mucho … pero mi relación con el cuerpo no era muy buena, padecía bronquitis asmática, grandes alergias , y un estado de cansancio constante, estaba bastante machacado, y esto me preocupaba, estaba acostumbrado a parar “ balonazos “ sin tomar acuse de recibo del daño que recibía mi cuerpo. Entonces gracias a Silvia Jaén mi mujer y maestra de yoga pude empezar a aprender el arte del yoga, creamos juntos la escuela Shiva Yoga realizando cursos de formación donde yo la ayudaba en las materias de autoconociento a través del yoga / Sangita Yoga . Actualmente sigo sus enseñanzas disfrutando de una salud y energía mucho mayores que en esos años de adolescencia. El yoga me ha demostrado que es una herramienta impresionante en la construcción de una persona a nivel energético, corporal y mental. Aunque soy profesor de hatha yoga ( E..I.Y ) el trabajo con Silvia desde el yoga Iyengar ha sido y es para mí fundamental en mi desarrollo y enseñanza del yoga. Trabajé durante 4 años dando yoga a niños en escuelas públicas en el programa “Muse “ de la Fundación Yehudi Menuhin y fue una experiencia muy enriquecedora a la vez de dura. Pasé por varios colegios y enseñaba yoga tanto en el aula como en sala con el tutor al lado, un trabajo serio, evaluado y que recuerdo con mucho cariño. Todavía recuerdo, como un niño gitano se sentó en el altillo del gimnasio en meditación completa y unos 30 niños más le imitaron haciendo lo mismo junto a varios profes durante varios minutos en silencio, por esto vale la pena enseñar. Actualmente he preferido dedicar mi energía a mis dos niños y dejar este trabajo para los vocacionales. Mi relación con el cuerpo va mejorando cada día más desde que realizé el curso de Terapia Gestalt en la (EMTG ) con Paco Peñarubia y su equipo y especialmente con el trabajo de Antonio del Olmo en el PCI donde puedo decir que estoy en disposición de decir que es este uno de los momentos mas potentes en plenitud y energía de mi vida, y se ha abierto una capacidad de apertura a la vida muy grande .
Parte de mi terapia personal la realice con Juan Manzanera y la supervisión con Lola Sánchez. También quiero resaltar los dos años que pase realizando terapia en la Fundación Rais de ayuda a las personas sin hogar. Esos años me ayudaron a colocar y limpiar lo mental, como decía Habib un profesor de yoga que tuve ( que en paz descanse ) , primero la terapia y después la disciplina. Sentía que me faltaba algo en mí y algo importante.
El amor , esta es la tercera cosa que me llamaba de pequeño, incluso cuando iba a misa , que no me gustaba nada, sólo la música del coro, donde tocaba mi hermano la batería, y la gozaba, sólo la sensación de que detrás de esos sermones cansados se podía sentir el amor en el fondo. Lo afectivo siempre me ha tenido preocupado pues yo siempre he sido una persona muy sensible y sencilla , y todo a mi alrededor parece que giraba al contrario de mí, era muy difícil centrarlo. Desde la música, pude empezar a entender mejor mis sentimientos y a expresarlos. La terapia Gestalt me ayudó mucho también en esto. El yoga me hacía encontrar mi sostén y mi calma a la vez. Todo esto hizo que naciera el sangita yoga ( el yoga de la Música ) donde pudieran convivir todos estos elementos juntos.
El curso del PCI realizado con Antonio del Olmo ha sido un experiencia muy completa, sanadora y realmente integradora para mi en todos los sentidos a nivel corporal/afectivo y mental. Completando aún mas mi visión gestaltica del ser humano a través del trabajo corporal. Es un gran paso adelante que sin duda esta influyendo en mi modo de vivir y de dar las clases y talleres, buscando que cada uno tenga la oportunidad de sentirse acompañado y al a vez con su espacio para darse cuenta de como conocerse desde lo corporal hacia los demás niveles.
Quiero agradecer la aportación y enseñanza del maestro Antonio Blay Fontcuberta siempre un guía muy importante en mi vida, a Silvia Jaén mi maestra de yoga entre otras cosas , a Paco Peñarubia, a Manuel Llorens por introducirme al maestro Blay y por supuesto a Antonio del olmo por su generosidad y autenticidad desde su método PCI. También a todos los profesores y maestros con los que he aprendido y sigo aprendiendo, especial recuerdo al gran Habib ba ya fallecido y del que muchas veces me inspira en mis clases de yoga, descanse en paz.
Quiero agradecer la aportación y enseñanza del maestro Antonio Blay Fontcuberta siempre un guía muy importante en mi vida, a Silvia Jaén mi maestra de yoga entre otras cosas , a Paco Peñarubia, a Manuel Llorens por introducirme al maestro Blay y por supuesto a Antonio del olmo por su generosidad y autenticidad desde su método PCI. También a todos los profesores y maestros con los que he aprendido y sigo aprendiendo, especial recuerdo al gran Habib ba ya fallecido y del que muchas veces me inspira en mis clases de yoga, descanse en paz.
Namaste
